martes, 2 de junio de 2009

UNA BONITA Y ACERTADA REFLEXIÓN


"SON CAPACES"


Da igual el sexo, la raza, o la religión.... siempre les unirá la pasión por el juego.El fútbol sala femenino contribuye a reivindicar el derecho de la mujer dentro de nuestra sociedad. La progresión de la mujer en el fútbol sala es uno más de los símbolo de identidad colectiva, sobre todos en los países donde la mujer sigue siendo ciudadano de segunda, donde cada gol, cada partido, se convierte en la mejor lucha por la igualdad.El fútbol sala femenino fomenta el sentimiento de pertenencia y de lucha de forma positiva. Y dentro del juego, el estilo refleja un modo de ser, que revela el perfil propio de cada país, de cada cultura y afirma su derecho a la diferencia.Ser mujer y jugadora de fútbol sala implica tener una gran responsabilidad social. Es ser modelo para mucha gente. Son transmisoras de valores inherentes a la competición como la superación, el esfuerzo, y el sacrificio.
"Ahora, lo único que falta es que las dejemos crecer".

HECTOR POSSE : www.futsalsurfem.com

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